(Guayaquil, 11/03/2021).- El regreso de Joan Laporta como presidente del Barcelona comenzó con muchos desafíos. Las exigencias son muy altas por el peso del club, por contar con Lionel Messi y por la necesidad imperiosa de posicionar nuevamente a la institución en los primeros planos internacionales.
Entre todos los retos que se trazó la nueva dirigencia, tanto deportivos, institucionales, económicos, figura recuperar la mística y el sentido de pertenencia. Para ello, uno de los primeros movimientos que piensa Laporta es cambiar el nombre de la filial.
Ahora se la conoce como Barça B, sin embargo, en otras épocas se llamó Barça Atlètic, nombre por el que algunos de los socios más veteranos aún se refieren al segundo equipo azulgrana. Esto ya había sucedido en el primer mandato de Laporta. En 2008 la filial recuperó el nombre de Barça Atlètic tras haberse llamado Barça B desde 1990 hasta esa fecha.
A lo largo de los años, su nombre fue mutando. Comenzó como Barcelona Atlètic en 1970, fruto de la fusión del CD Condal, que había sido filial azulgrana, y del Atlético Cataluña CF. Mantuvo ese nombre hasta 1990, cuando la Ley del Deporte la Real Federación Española de Fútbol obligó a todos los filiales a integrarse en su club matriz, adoptando su nombre. En esta línea, fue renombrado como Barcelona B. En 2008, Laporta le devolvió el nombre de Barça Atlètic y en 2010, ya con Alexandre Rosell de presidente, volvió a denominarse Barça B.
Fuente: marketingregistrado
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