La tarde de este lunes, la selección de Italia empató sobre la hora 1×1 ante Croacia, para clasificar a los octavos de final de la Eurocopa 2024.
El equipo de la Europa meridional llegaba a este partido tras la derrota en la segunda jornada ante el candidato España por 1-0, un resultado que lo obligaba a conseguir un punto ante Croacia para avanzar a la próxima fase.
Enfrente estaba el conjunto oriental europeo que, a diferencia de sus performances en las últimas dos Copas del Mundo, tuvo un debut para el olvido con España perdiendo 3-0 e igualando agónicamente 2-2 ante Albania. Con un punto solo en su haber, Croacia quedaba obligado a ganar para acceder a octavos de final como segundo del grupo.
En un Leipzig stadium repleto de helvéticos y tras un primer tiempo friccionado, el partido empezó a destrabarse en el inicio del complemento ya que, a los 8 minutos y tras recurrir al VAR, el árbitro neerlandés Danny Makkelie sancionó penal para Croacia por una alevosa mano de Davide Frattesi en el área italiana que desvió el remate de Andrej Kramaric.
El capitán y astro croata, Luka Modric, fue quién se encargó del penal rematando con sutileza al palo derecho de Gianluigi Donnarumma que acertó el disparo y evitó el gol del jugador del Real Madrid de España, despejando la pelota hacía su izquierda donde Federico Dimarco la sacó del área dejándosela a Lovro Majer a la derecha del círculo central.
El futbolista croata de 26 años empezó a encarar en diagonal hacia el área italiana, sacándose de encima a Nicolo Barella y tocando a su derecha para Luka Sucic que recortó para adentro y metió un gran centro al punto penal para Ante Budimir que anticipó a Matteo Darmian, punteó la pelota pero el propio Donnarumma, con una atajada increíble abajo, evitó el gol. En el rebote que dejó el arquero del Paris Saint Germain de Francia, el propio Modric fue quién lo capturó y definió sin marca alguna para poner el 1-0 haciendo delirar a todo el público helvético que empezó a prender bengalas en las tribunas detrás del arco italiano.
Este baldazo de agua fría hizo reaccionar a Italia que fue a buscar el empate con más coraje que fútbol y lo consiguió a los 52 minutos con el agónico gol de Mattia Zaccagni. Con toda Croacia en su campo, el defensor Riccardo Calafiori tomó la lanza y encaró por el medio hasta llegar a la medialuna del área donde abrió a su izquierda para Zaccagni que, en plena soledad, se acomodó antes de que llegue la pelota para, cuando llegue, pegarle con su pie derecho abierto al segundo palo del arquero Dominik Livakovic y marque un golazo para darle la clasificación a octavos de final al vigente campeón de Europa.
Con este resultado, Italia se clasificó a la próxima instancia de la Eurocopa en la que se enfrentará a Suiza el próximo sábado a las 13 de la Argentina. El estadio Olímpico de Berlín será la sede del encuentro.
Por su parte, Croacia no logró los puntos necesarios para estar, al menos, entre los mejores terceros y quedó eliminado del certamen continental en fase de grupos, algo que no pasaba desde la edición de 2012 que se disputó en Polonia y Ucrania.